Durante ya casi 6 meses hemos escuchado reiteradas veces la palabra anti-fluido sin saber muy bien su significado, la hemos usado y desusado sin mucho cuidado. Por eso, consideramos muy importante entender este concepto, para tener clara cuál es su función en esta época y por qué puede ser un aliado para retomar nuestras laborales ahora que empezamos una nueva etapa de confinamiento selectivo.
En primer lugar es importante aclarar que el anti-fluido no es una tela, es un acabado químico que repele líquidos y puede aplicarse casi a cualquier tipo de textil cuando sale de tejeduría y lavado, sin embargo, por lo general, el anti- fluido acompaña telas impermeables o repelentes a los líquidos. Esta tecnología funciona como un recubrimiento que busca generar protección y seguridad en las prendas.
Antes de la pandemia, no había mucho conocimiento sobre qué era el anti-fluido y mucho menos era tan utilizado cotidianamente, pues por lo general, eran solo los profesionales de la salud los que vestían prendas con esta tecnología. Sin embargo, a causa de lo que se supo sobre el virus y la manera en que podía adherirse a la ropa, nos vimos en la necesidad de adoptar este tipo de tecnología a las necesidades del resto de la población.
En ese proceso, aparecieron los ahora muy famosos overoles anti-fluido que buscan generar más protección con el ánimo de hacerle frente al virus. Sin embargo, muchas personas que trabajan en oficinas y requieren un vestuario sofisticado de acuerdo a la labor que ejercen, no ven como una primera opción el uso de los overoles anti-fluido, pues consideran que esta prenda puede ir en contravía de la imagen e identidad de busca proyectar la compañía de la que hacen parte.
Pero es precisamente por eso que consideramos la importancia de entender que el anti-fluido es una tecnología que se puede adaptar a diferentes telas. Con el objetivo de que los y las colaboradores puedan reintegrarse a sus labores, protegiendo su salud y sin impactar la imagen de su compañía, los uniformes empresariales en las telas en que se producen generalmente, pueden recubrirse con anti-fluido para obtener los mismos beneficios de los overoles pero sin afectar el estilo del vestuario.
Debido a la reapertura a la que instó el Gobierno Nacional, muchas de estas compañías abrirán sus oficinas y retomarán poco a poco sus labores cotidianas permitiendo que sus colaboradores y colaboradoras vayan a las instalaciones, sin duda, contemplar la opción de que las dotaciones empresariales se produzcan con esta tecnología anti-fluido puede contribuir al objetivo de cuidar a nuestro personal y de adaptarnos a esta nueva normalidad de la mejor manera.
Si estás interesado/a en adquirir este tipo de uniformes, no dudes en contactarnos a nuestro correo electrónico ventas@latextileradotaciones.com o a nuestro enlace directo a WhatsApp dando clic aquí.
